viernes, 9 de abril de 2021

POESIA: EL VIRUS LLEGO

El correr de los días era normal, se luchaba por el pan, y la salubridad
Los enemigos eran muchos, a los cuales enfrentar, en campiña y en ciudad
Nadie imaginó, que el gran enemigo llegaría, y todos los demás, a mi combate se unirían 
Los enemigos de siempre, dejaron de existir, ahora hay uno solo, que piensa resistir

El enemigo del terror, como un virus se expandió, y todo lo demás, bajo su manto se cubrió
Cobijado por la imaginación, causó mucha inspiración, en todos los tiranos, que nos quieren encerrar
El virus llegó, y no se piensa ir, solo le queda a los humanos, pasión por insistir
Contaminados de miedo, toda la urbe se escondió, de las garras del déspota, que se precipitó 

El hambre, el desempleo, la falta de libertad para vivir, son todos enemigos, que están lejos de escapar
Siguen triunfando, en las calles de la ciudad, pero ahora protegidos, por el virus que llegó
Que bajo su manto cubre, todo lo que generó, ya que todo se justifica, si es por la salvación 
Premios y castigos, el virus nos da, si cumplimos o no, con sus caprichos de autoridad

El virus llegó, y es muy fácil de contagiar, tan solo hace falta, al vecino buchonear
Vivir la vida, es más que suficiente, para caer bajo las garras, del virus del terror
Obsesiones contagia, y protocolos impone, para atacar la salud, de la mente que no piensa
El respirador necesitan, todos los comerciantes infectados, torturados por el miedo, y enfermos de un infarto

Los chicos ya no saben, qué expresión hacer, ya que ninguna cara ven
Ya no juegan con sus pares, porque están todos infectados
El enfermo terminal, fue la educación, y nadie le alcanzó, su respirador

Los hospitales colapsados, también fueron infectados, por la mala gestión, la mentira y el choreo
Antiguos enemigos, ofuscados por el virus, que siguen atacando, y a los mas débiles enferman
Todos se preguntan, por la vacuna contra el virus, que mientras este ataca, a todos esclaviza 
El antídoto no llega, solo llega de a poquito, y los más impunes lo roban, porque los excita el delito

Curiosamente, nadie se acordó, que la vacunación podía llegar, antes del horror
La cura está entre ellos, y nadie la vio, distraídos por el discurso, de la exageración 
La normalidad volvería, cuando todos lo dispongan, y el virus que llegó, la tendría que aceptar
Sus garras no pueden, a todos los humanos asustar, y estos unidos, tendrían que luchar
Para por fin recuperar, la humana normalidad